sábado, 30 de noviembre de 2013

El regreso

Despierto solo en un vagón vacío.
Nubes y campo adornan mi ventana,
un sol atardecido se devana
en hilos blancos de temprano estío.

Hoy siento otro dolor que no es el mío,
ocupa mi interior otra desgana;
apenas queda ya de esta mañana
un beso en un adiós de junio frío.

No sé si imaginar que alguien me espera
en el andén de un pueblo abandonado;
tal vez un pobre viejo con chistera
sonría con su rostro demacrado
y me lleve de vuelta a aquel pasado
de triste luz, de sueño, de quimera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario